Stefano Di Carlo ganó las elecciones y es el nuevo presidente de River Plate

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Stefano Di Carlo se convirtió en nuevo presidente de River Plate tras una elección récord para el club (Crédito: RS Fotos)

Stefano Di Carlo se convirtió este sábado en el nuevo presidente de River Plate. Después de un día histórico, los socios que votaron en las entrañas del Estadio Más Monumental, en una jornada con récord de participación, eligieron al que hasta hoy era el secretario general del club de la directiva que lideró Jorge Brito durante los últimos cuatro años.

El próximo lunes por la tarde asumirá el cargo de manera formal como titular de la institución de Núñez y a sus 36 años, será el mandatario más joven en la historia del club desde el ascenso de Antonio Vespucio Liberti (nacido en agosto de 1901) a la presidencia en 1933. En 2018, cuando asumió el rol de vicepresidente, Di Carlo también se había convertido en el directivo más joven (29 años) en estar en ese puesto.

Su primer objetivo será el de ordenar el problema futbolístico que tiene el club desde que Marcelo Gallardo tomó el control total y alejó a la dirigencia de la toma de decisiones y del día a día del plantel.

El flamante presidente estará acompañado por otros dirigentes que, al igual que él, también siguen una línea que comenzó hace más de 10 años con el desembarco de Rodolfo D’Onofrio como presidente de River. Andrés Ballotta, Ignacio Villarroel y Mariano Taratuty serán sus vices y ocuparán cargos fundamentales en la mesa directiva, en lo que será una continuidad clara del oficialismo que gestó el presente de un club que buscará nuevos objetivos rumbo a los cuatro años de gestión que afrontará hasta finales de 2029.

A la espera de la definición del Torneo Clausura y en la continua búsqueda de clasificar a la Copa Libertadores del próximo año, el máximo desafío del nuevo líder del club será futbolístico, en una etapa de turbulencias. La segunda etapa de Marcelo Gallardo al mando del plantel está lejos de ser la esperada y el tema fue uno de los más comentados durante la extensa jornada electoral en el Monumental.

Este domingo, el Muñeco vivirá un examen de alto riesgo ante la gente y en el campo de juego. El duelo por la 14ª fecha del Torneo Clausura contra Gimnasia de La Plata, que se iniciará a las 20.30, pondrá en contexto las chances reales de conseguir el boleto a la próxima Copa Libertadores. Luego de caer en cuartos de final en el Apertura, quedar afuera de la actual Libertadores y ser eliminado de la Copa Argentina, el Millonario tiene dos opciones para afrontar el máximo torneo continental en 2026: salir campeón del Clausura o apoderarse de uno de los dos boletos que quedan disponibles por la Tabla Anual.

Con Rosario Central ya asegurado en el primer puesto del conteo general con 65 puntos, River figura tercero con 52 unidades detrás de Boca Juniors (53) y apenas por delante de Argentinos Juniors (51) y Deportivo Riestra (51). Luego del compromiso ante el Lobo, el equipo disputará el Superclásico ante la Bombonera el domingo 9 de noviembre desde las 16.30 y cerrará la fase de grupos ante Vélez en Liniers en un duelo que marcará si logra el boleto a la Libertadores por la Tabla Anual o no.

La eliminación en semifinales de la Copa Argentina ante Independiente Rivadavia de Mendoza la semana pasada puso el foco definitivamente sobre el desempeño de Gallardo, quien sumó otra frustración en este nuevo ciclo al mando del plantel contabilizando la eliminación en semifinales de la Libertadores 2024 ante Atlético Mineiro, la derrota en la Supercopa Internacional ante Talleres de Córdoba, la derrota en cuartos de final del Apertura contra Platense, el adiós en fase de grupos del Mundial de Clubes y la derrota contra Palmeiras en cuartos de final de la presente Libertadores.

“Por supuesto que al final de la temporada, el fútbol, el tema de mayor centralidad, relevancia e interés tanto para nosotros como para toda la familia de River, vamos a hacer las evaluaciones del caso y la sintonía fina. Debemos corregir y mejorar. Nosotros vemos lo mismo que ve la gente de River. Que tenga la tranquilidad el hincha y el socio que nosotros, cuando hay un problema, vemos lo mismo que ellos. Y lo que hacemos es abordarlo, atacarlo y corregirlo”, reconoció el propio Di Carlo luego de votar durante el mediodía del sábado.

“Lo que se ratifica es el rumbo, el norte, el camino institucional. Llevamos 12 años. Agarramos un club en condiciones muy complejas. Hicimos muchas cosas. Por supuesto, hemos tenido a lo largo de estos 12 años en un cierto momento éxito deportivo marcado. En otros, la inversión en infraestructura que ha sido icónica. Esos son carriles que van en paralelo. River debe seguir creciendo institucionalmente. Una cosa no invalida la otra”, subrayó.

Por otra parte, otro de los puntos salientes que proyecta Di Carlo como nuevo líder de esta etapa del oficialismo será continuar con la transformación del club, que incluyó un plan de obras que continuará con las mejoras en el estadio, lo mismo con el avance del Centro de Alto Rendimiento en el predio Cantilo para las divisiones inferiores de más de 5.000 metros cuadrados a un kilómetro del Monumental y la modernización de instalaciones para socios que impulsará nuevas comodidades para los más de 350 mil riverplatenses que disfrutan de los espacios y de variadas disciplinas.

Di Carlo, un apellido histórico en River

La historia marca que el apellido Di Carlo es parte de una tradición que pasó generaciones en la vida interna del club. “Mi abuelo fue presidente; mi bisabuelo, o sea su padre, fue secretario general. Mi abuelo me dejó el amor por River. Fui prácticamente criado por mi abuelo. Crecí en el club. Es mi casa. Fui al colegio, al instituto de River, tuvimos el honor ahora con Brito de haber inaugurado el edificio de 5000 metros cuadrados. Soy producto de la casa y aparte toda la vida. Practiqué deportes. Mi abuelo desde los 6 años me llevó de local y visitante. No expresaba mi intención de ser presidente, pero sí tenía el espejo de quién me crió”, mencionó el nuevo titular de la institución de Núñez en una entrevista durante la campaña.

Nieto de Osvaldo Titi Di Carlo, histórico presidente, y bisnieto de un ex secretario general, Stefano se formó en las entrañas de la institución. “Soy un joven, nacido y criado en River, que tuvo el honor de formar parte de estos 12 años de los procesos que lideraron D’Onofrio y Brito, y que hoy tiene la enorme responsabilidad de continuar esta tarea. Y que a nivel personal, lo que uno busca es dejar un legado, que es un legado que hemos construido con los vices y con toda la gente que estuvo en este proceso”, mencionó sobre su participación en las diferentes áreas del club tras los pasos de los anteriores presidentes de este oficialismo como Rodolfo D’Onofrio y el saliente Jorge Brito.

En las últimas gestiones, Di Carlo fue vocal titular tras las elecciones de 2017 y, al año siguiente, se convirtió en vicepresidente segundo luego del fallecimiento de Guillermo Cascio. Su trayectoria en la entidad incluye la presidencia del Departamento de Comunicación, Medios y Digital; la coordinación del Área Educativa y la participación en cuerpos directivos del Instituto River Plate a todos sus niveles.

El oficialismo de River tendrá otros cuatro años más al mando de la entidad tras el proceso que se inició con Rodolfo D’Onofrio en los comicios de 2013 en un contexto hostil del club tras la gestión de Daniel Passarella que tuvo al club en la Primera B Nacional por primera vez en su historia. D’Onofrio firmó su reelección en 2017 y luego fue Jorge Brito quien en el 2021 dio continuidad al ciclo.

Di Carlo conducirá los destinos de la institución de Núñez durante los próximos cuatro años y, tras la reforma del Estatuto en 2023, no está contemplada la posibilidad de una reelección.