Hallaron el cuerpo mutilado de una mujer en Pilar y su pareja intentó suicidarse antes de ser detenido

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Un brutal femicidio seguido de un intento de suicidio ocurrió en un departamento en el centro de Pilar, ubicado sobre la calle Rivadavia al 700, donde la Policía localizó el cuerpo de Solange Sanabria Ventura, de 25 años, dentro de bolsas de nylon, envuelto en frazadas y atado con sogas. La víctima estaba desaparecida desde el 1 de septiembre.

La intervención policial se produjo tras una denuncia al 911 motivada por fuertes olores que emanaban del segundo piso del edificio.

Al ingresar al departamento, los efectivos de la Comisaría 1ª de Pilar y de la Sub DDI Pilar hallaron el cuerpo de la joven, que tenía mutiladas sus extremidades. Junto a los restos, sobre un lavarropas, se encontraba un serrucho de madera con restos de piel y sangre, elemento que habría sido utilizado en el crimen.

Encontraron el cuerpo mutilado de una mujer y su pareja intento suicidarse antes de ser detenido (Foto: Pilar a Diario)

Mientras los agentes inspeccionaban la escena, escucharon un quejido proveniente del interior del departamento. Al avanzar, descubrieron a O. A. B., de 26 años, pareja de la víctima y residente del lugar, con cortes autoprovocados en los brazos.

Según la información policial brindada por el medio local Pilar a Diario, O. A. B. habría intentado quitarse la vida utilizando el mismo serrucho. El acusado fue trasladado en calidad de detenido al Hospital Central de Pilar.

El femicida fue trasladado al Hospital Central de Pilar tras autolesionarse

La investigación determinó que Solange Sanabria Ventura tenía el domicilio radicado en la calle Arroyo Correntoso al 1000 de General Rodríguez y se encontraba desaparecida desde el 1 de septiembre.

Sus allegados habían presentado una denuncia de paradero en la Comisaría General Rodríguez 1ª, con intervención de la Unidad Funcional de Instrucción Nº 10 de Moreno.

Solange Sanabria Ventura tenía domicilio en la calle Arroyo Correntoso al 1000 de General Rodríguez

El médico policial que examinó el cuerpo confirmó que la víctima presentaba mutilaciones en ambas extremidades inferiores, a la altura de la rodilla y en el brazo izquierdo.

Se dispuso la realización de una autopsia para esclarecer las circunstancias y la mecánica del crimen.

La causa fue caratulada como “aprehensión por delito de femicidio” y “tentativa de suicidio”. La investigación está a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción de Género de Pilar, bajo la dirección de María José Basiglio.

Horas después del macabro hallazgo, la Policía detuvo a un segundo implicado en el crimen. Se trata de G. M. L., quien había colaborado con el femicida para trasladar el cuerpo.

Los restos de una joven de 25 años, desaparecida desde el 1 de septiembre, fueron hallados dentro de una bolsa de nylon (Foto: Pilar a Diario)

Hace menos de dos meses, en Berisso, Nicolás Ángel Castro, de 30 años, asesinó a su pareja, Yésica Noelia Duarte, de 33 años, e intentó quitarse la vida. Luego de haber permanecido más de un mes internado, la Fiscalía dictó la prisión preventiva para el femicida. Previamente, lo habían procesado al negarse a declarar.

La investigación, a cargo de la fiscal Ana Medina, reveló que tanto la víctima como el presunto agresor cumplían prisión domiciliaria y portaban tobilleras electrónicas. El domicilio donde se produjo el crimen había sido fijado ante la Justicia como residencia para ambos, quienes estaban bajo monitoreo penitenciario.

El relato inicial de la madre de Castro, quien afirmó que un grupo de delincuentes había intentado robarles, fue desmentido por la hija de Duarte.

Según su testimonio, un vecino le contó que Castro disparó “dos tiros” a su madre y luego se disparó en la cabeza. La joven también declaró que su madre sufría violencia de género y amenazas constantes por parte de Castro, quien tenía antecedentes por tenencia de armas y estaba bajo arresto domiciliario por homicidio calificado desde junio.

En la escena, la Policía Científica halló dos impactos de bala en el paredón, tres vainas servidas y desorden en el cuarto de la pareja.

Castro fue trasladado al hospital Larraín con una herida de bala en el cuello y otra en el abdomen, donde permaneció en estado grave y bajo vigilancia por más de un mes.

Mientras permanecía en el nosocomio recuperándose de las heridas, fue procesado formalmente por negarse a declarar ante la fiscal Cecilia Corfield, cuando los peritos médicos confirmaron que se encontraba lúcido y en condiciones de afrontar la audiencia. A los pocos días, su mamá quedó en libertad, luego de haber sido detenida por tenencia ilegal de armas.

Su arresto se había producido luego de un allanamiento en la casa de Adriana Oviedo en donde los agentes de la DDI La Plata y la Comisaría 3ª de la ciudad, secuestraron dos armas, un revólver calibre .32 largo, sin marca visible, con cuatro balas en su tambor, y una pistola Bersa Thunder .380.

En aquel momento, la defensa consiguió revertir la medida tras argumentar que no existían pruebas suficientes para vincularla con el asesinato y que su defendida presentaba problemas de salud que requerían atención.